Si vas a una tienda, muy probablemente vas a notar las promociones que tienen varios productos de lleve dos por uno o el famoso "regalo sorpresa". Esta escrito cuenta la historia del paquete de mani que no vino marcado, pero vino acompañado de un gran premio.
Una tarde un hombre se acerco a una maquina misteriosa que siempre exigía un tributo para ofrecer un deseo a cambio. La maquina muy cordial siempre saludaba y pedía que la alimentaban con un papel especial o con metales adornados y pulidos muy cuidadosamente. Ese día el hombre ya tenia en mente lo que deseaba pedir, al igual que tributo debía ofrecer. El artefacto le pidió al hombre que ofreciera el tributo y este al entregarlo, fue rechazado inmediatamente, no una sola vez, ni dos, sino 3 veces. El hombre se detuvo a pensar, sin notar que una figura se acercaba lentamente.
"Hola, la maquina no quiere conceder deseos hoy?"- Pregunto la voz de una mujer.
"No, creo que no esta de acuerdo con mi tributo, tal vez deba buscar otro en mis pertenencias"- respondió el hombre, mientras buscaba en su bolsillo -"Te cedo mi turno mientras busco"
"Entiendo, muchas gracias"-La mujer se acerco tomo su tributo, lo ofreció, realizo un par de movimiento con los dedos para terminar el ritual y su deseo fue concedido. En ese momento una rueda activo un mecanismo para indicar que era el ultimo de este tipo de deseo que cumpliría hoy y quizás en un par de días mas. El hombre comprendió inmediatamente que era el tipo de deseo que el iba a pedir. Se preparo para encarar a la persona que se le había adelantado y vio la sonrisa de una mujer, concedida por que su deseo había sido cumplido.
"Yo deseaba exac...."- intento decir pero las palabras se ahogaron.
"Ahí, lo siento"- Dijo ella.
"No te preocupes, ese deseo era para ti, puedes quedártelo, Mucho gusto, mi nombre es Jshuin"- dijo el hombre
"Mi nombre es Rymia"-respondió ella.-"Lamento mucho, haber tomado tu deseo"
"No, de verdad, tómalo tranquila, disfrútalo, Si de verdad quieres resarcirte, para la próxima paga el tributo por mi, creo que hoy pediré otro deseo"
Ella sonrió y acepto con la cabeza, -"puede que hasta podamos compartir una bebida con ella".
Ambos se despidieron y disfrutaron su deseo separado.
De ese día en adelante se volvieron a encontrar y disfrutaron grandes momentos, la vista de una ciudad fantástica, sonrisas, abrir pensamientos.
Una bolsa de deseos puede tener un precio que varié según la maquina a la que se la pidas. Por otro lado, la oportunidad de establecer un lazo de amistad puede estar en la posibilidad de que se te niegue ese deseo, entregando el segundo un valor muchísimo mas grande.
La amistad a través del tiempo llega a conceder los mejores deseos, que no piden nada a cambio, y que generan sonrisas.
Viajando en tren por un sendero misterioso conozco a esta hermosa mujer que busca sonreirle a la vida y estas lineas son para ella.
Siempre hay un rayo de sol esperando iluminar el siguiente paso que hay en frente de ti.
El piso puede tener apariencia inestable pero es la fuerza de tu paso la que dejara la huella y le enseñara a los demás que este camino se puede recorrer.
Las sonrisas pintan en las nubes, pintan en el alma, pintan en el corazón, pintan en los recuerdos eternos y en la lucha constante de cada día.
El cariño, le da el toque personal a los momentos y el alma sin ocultar los sentimientos firman los momentos para entregar su legado a la fuerza de nuestro corazón.
Un corazón puede acabar con la furia de un dragón, varios corazones unidos hacen que la tierra tiemble a tal punto que se cree un eco en lo mas alejado de la galaxia.
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